Crucero del Norte le abre las puertas a Sudamérica  

Ene 24, 2023

Crucero del Norte fue fundado el 28 de junio de 2003. Sus casi dos décadas de vida institucional y deportiva han sido intensas. El Colectivero jugó en Primera División A y posee instalaciones de nivel profesional. Será la sede del II Sudamericano de la AAVF. Del 2 al 5 de noviembre.

 

El II Sudamericano organizado por la Asociación Argentina Veteranos Fútbol (AAVF) llegará a Misiones y se instalará en el Club Mutual Crucero del Norte. Una institución modelo en el noreste del país, con excelentes instalaciones y campos de juego. Al margen de ello, tiene una intensa historia de vida deportiva e institucional para contar, desde su fundación, el 28 de junio de 2003. Y sin dudas que hizo camino al andar. Llegó a Primera División A, y actualmente disputa el Torneo Federal A de fútbol.

Del 2 al 5 de noviembre será la sede del Sudamericano. Y sin dudas la provincia de Misiones, Posadas, Garupá (sede del club a pocos kilómetros de la capital) y Crucero del Norte, harán que el futbolista que la visite se vaya con un recuerdo inolvidable.

LA HISTORIA DE CRUCERO

La Asociación Mutual del Personal de Crucero del Norte, nació como idea hace más de dos décadas, cuando empleados de la empresa y la familia Koropeski, participaban y seguían las alternativas del equipo de fútbol de salón, que ganó numerosos torneos locales, provinciales y nacionales, con destacadas participaciones en campeonatos Sudamericanos. Ante la repercusión que fue tomando aquella entusiasta formación, directivos de la compañía de Transporte junto a un grupo de colaboradores, comenzaron a darle forma a esta idea, la de un Club propio, donde la familia de los empleados tenga su espacio para el esparcimiento, recreación y practicar deportes.

Todo lo que está relacionado a Crucero del Norte lleva un sello de calidad, impreso por la gente que reconoce la trayectoria de una empresa familiar, ajustada a los avances tecnológicos y al liderazgo de tantos años, por lo que la formación de una comisión para trabajar en la idea de la fundación de un club no se hizo esperar. La llegada del nuevo siglo los encontró trabajando en la elección de un terreno y en la elaboración de un proyecto institucional serio, a largo plazo e inédito para clubes del Nordeste Argentino.

PASÓ POR TODAS LAS CATEGORÍAS

Desde el año 2003 (año de la fundación), el club comenzó a participar en los torneos de la Liga Posadeña de Fútbol, abandonando el fútbol de salón para instalarse en el fútbol grande, en las competencias federadas. En su segunda participación completa en primera división A, consiguió el título de campeón y se clasificó para disputar el Torneo del Interior, Temporada 2004/2005.

Ya en el primer escalón del certamen de ascenso, el equipo realizó una campaña histórica para la categoría, disputando 18 partidos, de los cuales ganó 9, empató 8, perdió sólo uno conquistando 33 goles y recibiendo sólo 11. Esa campaña, sin lugar a dudas, lo mandó directamente al ascenso al Torneo Argentino B.

Ya en la última etapa del torneo, que finalizó en junio de 2005, la Institución presentó en sociedad la primera parte de la obra del Estadio Comandante Andrés Guacurarí, de Garupá, con una capacidad inicial de 5 mil espectadores y comodidades inéditas para la provincia.

Paralelamente a su participación en los torneos de ascenso del Fútbol Argentino, siguió compitiendo en el Torneo doméstico, accediendo a tres finales consecutivas. A mediados de la temporada 2005/2006, comenzó a transitar el camino del Torneo Argentino B, enfrentándose a grandes clubes de la región y con mucha trayectoria como Textil Mandiyú, de Corrientes, y el histórico Chaco For Ever de Resistencia, Chaco.

El 25 de junio de 2006, recibió en su estadio al primer equipo de San Lorenzo de Almagro, conducido técnicamente por Oscar Ruggeri, con jugadores de la talla de Sebastián Saja, Adrián González, Ezequiel Lavezzi, Jonathan Botinelli, Ferreyra, Hernán Peironi, Agustín Orión, entre otros.

Meses más tarde, puso en marcha el proceso para su segunda temporada en el Torneo Argentino B, instancia a la que arribó a semifinales, perdiendo en una dramática definición por penales. Antes, se dio el lujo de inaugurar el sistema lumínico más potente del litoral, con la presencia en Santa Inés, del Club Atlético Boca Juniors, el 7 de Febrero de 2007. Miles de misioneros se acercaron a ver al “Xeneize”, que contaba en su plantilla con jugadores reconocidos a nivel Mundial, como lo eran: Martín Palermo y Guillermo Barros Schelotto.

En septiembre de 2007, el Club Crucero del Norte arrancó su tercera temporada ininterrumpida en el certamen conocido como: Argentino B, repitiendo el acceso a semifinales. Allí quedó eliminado por un punto de diferencia con su rival, Central Córdoba de Santiago del Estero. Realizó una campaña notable, convocó masivamente al público y es el único estadio que no registra incidentes en la tribuna merced al dispositivo de seguridad permanente, además de contar con capacidad suficiente para separar a todas las parcialidades.

El Estadio Comandante Andrés Guacurarí dispone de modernas cocheras para los visitantes, sector de plateas con una vista panorámica, y sanitarios en lugares estratégicos. Manga reglamentaria y cabinas de transmisión para la prensa en perfecto estado.

LLEGAN LOS ÉXITOS

Luego de tres temporadas ininterrumpidas en el campeonato de ascenso más exigente de la Argentina, lugar que la Institución se lo ganó por méritos deportivos y adjudicándose en la cancha el premio, los esfuerzos se concentraron aún más en el próximo salto de calidad: Torneo de Argentino A.

Los dirigentes del Club Crucero del Norte mantuvieron la base del certamen anterior, llegaron refuerzos de jerarquía con dos nombres de peso: José Luis Marzo y Derlis Soto. La campaña fue sencillamente notable hasta arribar a la final ante Estudiante de Río Cuarto, serie que el “Colectivero” perdió por penales para desembarcar, una vez más, en la instancia de la promoción ante Alvarado de Mar del Plata. El juego de ida en Santa Inés fue victoria para los de la tierra colorada por 1 a 0, tanto convertido por el histórico Pedro Brítez. Y en la revancha, desarrollada en el mítico Estadio Mundialista de Mar del Plata, el pleito finalizó sin goles, permitiendo a Crucero del Norte ascender y festejar de frente a las tribunas donde miles de misioneros viajaron para disfrutar de un mediodía inolvidable.

El Torneo Argentino A confirmó que se trataba de un campeonato más exigente, más competitivo y con jugadores de muy buen nivel. Tres temporadas bastaron para afianzarse definitivamente en la divisional hasta acceder al profesionalismo. En los tres años que Crucero jugó en la tercera categoría del Fútbol Argentino, siempre llegó hasta instancias decisivas, quedando a las puertas de una definición mano a mano. Pero fue en la Temporada 2011/2012, que la formación que conducía Pedro Dechat, consiguió un nivel de juego y una personalidad necesaria para lograr el objetivo que, desde los orígenes, se había planteado Julio Koropeski, cuando fundó el club: Llegar a la B Nacional. Crucero fue líder en su zona, clasificó sin problemas, jugó la instancia decisiva de la ronda Campeonato y no pudo ascender directamente, tras un recordado empate sin goles en Pergamino. En el Repechaje, se sacó de encima a grandes de la divisional, como Talleres de Córdoba, para acceder a otra Promoción, esta vez en Puerto Madryn. Tras el empate sin goles en casa, Crucero necesitaba vencer en el sur del país, logró imponerse con el tanto de Pablo Motta que lo depositó en la B Nacional, el salto al profesionalismo, el gran objetivo cumplido de Crucero del Norte.

“Retroceder nunca, rendirse jamás”, una película cuyo título, se adapta al pensamiento de la familia Koropeski, que lejos de conformarse por el arribo a la divisional más difícil del país, decidió seguir con el proyecto, haciendo su camino paso a paso. El primer año mantuvo la categoría, en la segunda temporada fue protagonista y estuvo en puestos de ascenso faltando tres fechas y en el segundo semestre de 2014, se lanzó decididamente a llegar a Primera A. Con un presupuesto bajo, sin grandes nombres, pero priorizando futbolistas que dejen la vida por Crucero, la ilusión del fútbol misionero viajó en colectivo durante meses muy intensos. De la mano del entrenador Gabriel Schurrer, Crucero del Norte dejó al fútbol misionero en un sitial de privilegio, codeándose con las grandes estrellas de la Argentina.

EL DIA DEL ASCENSO

Los dirigidos tácticamente por Gabriel Schurrer lograron el máximo objetivo, llegaron a Primera División, e hicieron que Misiones vuelva a estar en la elite del Fútbol Argentino. Ante un Andrés Guacurarí colmado, con más de 12 mil personas, el 30 de Noviembre de 2014, goleó 3 a 0 a Patronato de Paraná, con goles de Tomasini y Ávalos, en dos ocasiones, en el cotejo correspondiente a la vigésimo primera fecha de la Zona A, del Torneo de Transición de la Primera B Nacional 2014.

De esta manera, Misiones volvió a respirar el verdadero fútbol, ya que el “Colectivero” representó a la tierra colorada en la máxima categoría, ya con Sebastián Rambert como director técnico.

En sucesivas notas se desarrollará el crecimiento edilicio y que será disfrutado por los asistentes al Torneo Sudamericano de la AAVF.

Fuente: www.clubcrucerodelnorte.com.ar